sábado, 22 de marzo de 2014

¿Me será de utilidad lo que estoy estudiando?

Todos los estudiantes a lo largo de nuestro transcurso académico nos hemos preguntado más de una vez para que sirva realmente las asignaturas que estamos estudiando. Una gran mayoría no le encuentra utilidad alguna, pero se equivocan.

Creo que casi todo lo que estudiamos nos sirve para algo, aunque no vayas a necesitarlo para el trabajo que deseas o en tu día a día. Por ejemplo, todos dicen que aprender sintaxis en la clase de lengua castellana no te va a servir de nada porque en el futuro no te van a pedir que la realices, pero eso te ayuda a saber construir una oración adecuadamente, aprendes a hablar con mayor propiedad e incluso en algunos a mejorar sus faltas de ortografía o corregir la dislexia, la sintaxis no sirve específicamente para eso pero puede ayudar bastante. En el caso de las matemáticas y la economía, aunque no sea de mayor interés para muchos, no vas a poder prescindir de ellas en un futuro aunque no trabajes de ello, porque en la vida cotidiana siempre vas a utilizarlas ya sea para hacer compras, calcular los gastos de una cosa o gestionar una pequeña empresa. Por último, en el caso de la historia, literatura, filosofía y ciencias del mundo contemporáneo, interesa porque consigues tener más cultura general y acceder a temas que sin esas asignaturas no conocería. 


En conclusión, considero que todo lo que aprendemos en estas asignaturas nos es útil  para desarrollarnos culturalmente, y por lo menos poder tener unos conocimientos mínimos que son imprescindibles para el desarrollo de una persona y poder desenvolvernos bien en un futuro, tanto laboral como personalmente. 

sábado, 8 de marzo de 2014

El alma es lo auténticamente humano.

Desde mi punto de vista me considero una persona dualista, porque pienso que los seres humanos tenemos cuerpo y alma. Creo que sin el alma no tendríamos vida, ni seríamos como somos, es lo que nos permite realizar nuestras facultades. Para mí el alma es la explicación de nuestra existencia.

Al ser creyente también pienso que cuando la gente muere su alma puede ir al cielo o al infierno, no que el mundo se acaba y no eres nada. El alma es espiritual, no es materia, por lo tanto no puede morir, lo único que muere y se descompone es el cuerpo y el alma sobrevive. Los seres humanos somos muy misteriosos y complejos y la ciencia aun no ha podido explicar del todo como somos así. Gracias al alma las personas pueden decidir cómo ser y como actuar en cada momento de nuestra vida porque somos libres de elección y pensamiento.


Para mí un ejemplo de que tenemos alma son los sentimientos, el amor que tenemos por las personas, la tristeza, los remordimientos, para mí es una cosa que no tiene nada que ver con el cerebro, porque es algo que lo sientes dentro de ti. Me cuesta creer en la gente que dice que no existe el alma porque sin ella no le encuentro sentido a la vida, también pienso que el alma es lo auténticamente humano, como defendía Platón, superior a lo puramente material. Elijo esta teoría porque es en la creo pero seguramente lo que más me ha influido en la decisión es por la educación que he recibo y es lo que he visto desde que era pequeña.

sábado, 8 de febrero de 2014

¿Cómo impartir la mejor clase?

En la actualidad hay muchas personas que se dedican a la enseñanza y todos y cada uno de ellos con su propio método para dar su clase pero, ¿es realmente el método correcto? Es una pregunta que se habrán hecho muchos profesores en algún momento. Yo explicaré, desde mi punto de vista, que sería necesario para dar la mejor clase posible.

Por ejemplo en una clase de filosofía, el profesor o profesora debe tener buena memoria para almacenar y recordar todo los datos que necesita para así tener un dominio sobre el tema. Pero eso no es suficiente, sus alumnos tienen que notar que el maestro tiene interés por enseñar y de que ellos aprendan todo lo posible en sus clases. De este modo si los alumnos le ven seguro de sí mismo en todo momento les transmitirá esa seguridad a ellos, les estimulará y motivará.
Una de las cosas más importantes que el profesor debe tener en cuenta es que no todos los alumnos tienen el mismo nivel intelectual. Por eso debe empezar desde cero para que todos tengan la misma base, sin tener en cuenta el nivel académico de cada uno.

Otro factor es la empatía con los alumnos, ser más cercano y tener una relación más directa con el alumno puede hacer que se mejore la comunicación. También debería usarse un lenguaje más coloquial con un vocabulario más sencillo para que el temario se comprenda mejor. Podemos incluir en las explicaciones, para memorizar y entender mejor la materia, un ejemplo fácil, relacionado con lo que nos rodea o simplemente humorístico, ya que el humor en su justa medida hace la clase más amena y ayuda a transmitir su mensaje con más facilidad.